Quien no haya ido a comer alguna vez churros a la Marina ni es de Cadi ni es de ná. Merendar o desayunar en aquel sitio donde las servilletas de papel en el suelo son como papelillos de carnaval. Hombre, permítanme también la exageración. La cafetería La Marina ubicada en pleno centro del casco antiguo, entre la plaza de las Flores y el Mercado Central cerraba sus puertas este mismo viernes tras 54 años sirviendo café con churros. La ciudad pierde con esto a uno de sus comercios más emblemáticos. La causa es la jubilación de su propietaria,

Sin embargo serán solo unos meses ya que está previsto que vuelva a abrir en febrero bajo una nueva dirección. ¡Qué mejor fecha para arrancar un negocio! Pablo Moral, Guillermo Moral y Ale Alcántara han conseguido llegar a un acuerdo con la propietaria Mari Carmen para hacerse con el negocio con una sola condición: que se siga llamando igual y se sigan sirviendo churros. Así que trato hecho. El local volverá a abrir por carnaval con aires renovados y el que así lo desee podrá volver a desayunar o merendar el café con churros como se viene haciendo desde hace décadas. Eso sí, según cuentan los nuevos propietarios se reforzará la carta de los almuerzos y las cenas con frituras, mariscos, guisos y chacinas. Los domingos, hasta ahora día de descanso en La Marina, también abrirá lo que supondrá una importante novedad con respecto a su antecesor. ¡Mucha suerte!

@ManoloDevesa