Después de más de una década cerrada, las instalaciones de la Residencia del Tiempo Libre acogerán tras su compra un hotel de 268 habitaciones con aparcamiento subterráneo de tres plantas y un centro comercial de otras dos en pleno Paseo Marítimo. Aunque ésto alerta a los pequeños comerciantes del casco antiguo, creo que realmente estamos ante una buena noticia. Cádiz necesita urgentemente de la inversión de grandes empresas que acojan en sus plantillas a gaditanos y gaditanas, algo que debería ser condición sine qua non para su apertura. No es la primera ni la última vez que visitando algún centro comercial de la provincia uno se encuentra con medio Cádiz allí. Es lógico ante la falta de ofertas de ese tipo en la ciudad.
Se habla de las consecuencias que la apertura de un centro de estas características puede acarrear a las pequeñas empresas del casco histórico. Es lógico y además tienen toda la razón. Sin embargo, lo que deberán hacer éstas es luchar con sus propias armas contra las marcas que se instalen en el centro comercial con algo que no tiene ninguno: cercanía e inmediatez. El centro de Cádiz necesita un cambio de chip y ofrecer a los gaditanos y visitantes facilidades para que llegar hasta ahí no sea un problema. Alquileres de locales asequibles para que los comerciantes apuesten por más proyectos, más aparcamientos para los clientes y horarios flexibles para los diferentes negocios. Algo ésto último que puede facilitar a los trabajadores la ansiada jornada por turnos y no la tan temida del partido. Pero por supuesto si hay algo clave para que el centro conserve a sus clientes es no caer en el error de abrir en el centro comercial las mismas marcas. Por qué ya me dirán ustedes qué hacemos con algunas franquicias que ya les cuesta llenar una sola tienda…
En cuanto a la apertura del hotel que albergará a 268 habitaciones deberíamos verlo como algo crucial para que de una buena vez se ponga el límite a los verdaderos culpables de la cada vez más difícil accesibilidad a una vivienda en nuestra ciudad: los apartamentos turísticos. Los hoteles traen consigo puestos de trabajo en mayor medida que los dichosos apartamentos y con 268 nuevas habitaciones, sería justo que unos cuantos deban de cerrar sus puertas y dejarle el sitio a los que verdaderamente lo necesitan: los gaditanos. Para eso la unión es primordial. Si hay dos razones que resumen la desgraciada sangría de habitantes en nuestra ciudad son precisamente las que hemos hablado aquí: el desempleo y la falta de viviendas.
@ManoloDevesa
Ese magnífico edificio era propiedad de los trabajadores españoles. ¿Porqué ha estado cerrado tantos años echándose a perder? ¿Porqué se ha privado a los trabajadores españoles tanto tiempo de su disfrute? ¿De quién es ahora su titularidad? ¿Y porqué no se vuelve a utilizar para mismo uso social?
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