Ya lo avisaban los partes meteorológicos de estos días atrás y al final se ha cumplido. Tras retrasar la salida a en dos ocasiones y a pesar de la mucha gente que esperaba ansiosa a las puertas de la Iglesia de Santo Domingo con sus paraguas en mano, el padre Pascual Saturio confirmaba antes de las 19.15 horas la suspensión de la procesión debido a la lluvia que no terminaba de cesar.
Por la mañana y bajo mazas la Corporación se dirigía hacia la iglesia de Santo Domingo para asistir a la Función principal y la renovación del voto de la ciudad hacia la Virgen del Rosario, que ha realizado el alcalde Bruno García.

La Virgen del Rosario tenía previsto realizar su salida procesional a partir de las 18.30 horas, bajo el acompañamiento musical de la banda de música Maestro Dueñas, de El Puerto de Santa María y recorriendo Compás de Santo Domingo, Plocia, Plaza de San Juan de Dios, Avenida 4 de diciembre, calle Sánchez Barcáiztegui, Manzanares, Cobos, Plaza de la Catedral, Pelota, Plaza de San Juan de Dios, Sopranis y Convento de Santa María, donde hubiese llegado alrededor de las 21.30 horas. No ha podido ser. El año que viene será.