El Viernes de Dolores las iglesias de Cádiz son un auténtico hervidero. De colegios que acuden a ellas con sus niños y niñas para celebrar el comienzo de la Semana Santa y de gaditanos que visitan los pasos ya montados para los próximos días. Santa María, Santa Cruz, San Francisco o San Lorenzo son centro de la entrada y salida de un público deseoso de una nueva Semana Santa. La de este año con un pronóstico demasiado incierto. Con unos partes que dan lluvia todos los días. Veremos si finalmente es así y el fenómeno viento hace su «milagro». Porque a pesar de que las lluvias son necesarias en un momento de sequía, también es cierto que siempre que llueve lo hace en grandes acontecimientos. Dícese de carnaval, Feria de abril o Semana Santa.
A pesar de cargar siempre con la cruz del Carnaval, si es que se puede considerar así porque nada tiene de malo, Cádiz es cada vez más cofrade. Muestra de ello son las ganas de cofradías que el público demuestra cada vez que una sale a la calle. Anoche mismo se llenó por la tarde noche para ver a Dolores Servitas partir de la iglesia de San Lorenzo en la calle Sagasta a las siete de la tarde dispuesta a procesionar un año más.
Acompañada de la música de la Banda Musical Maestro Tejera de Sevilla, la obra anónima atribuida a la escuela genovesa del S. XVIII fue admirada un año más inaugurando las procesiones que tendrán lugar a lo largo de estos días de Semana Santa. Ojalá sea así.
@ManoloDevesa
LA AZOTEA DE CÁDIZ 