Cádiz respira historia por cualquiera de sus rincones. Lo hemos observado muchas veces a lo largo de los años. Cuando se ha excavado la tierra en cualquier obra, han salido restos arqueológicos que lo que han hecho entre otras cosas, todo hay que decirlo, es retrasar a veces indefinidamente la obra en cuestión. Pues bien, dentro de los cambios que Aguas de Cádiz pretende hacer en la fuente de la Puerta de Tierra modernizándolas para darles mayor presencia, en la mañana de ayer se encontraban con las bóvedas del siglo XVIII sobre las que en su día pasaba el tranvía o los numerosos coches de caballo. Cuando a principios de la década de los años 30 se decidió urbanizar los glacis, se tapó con tierra y escombros. Casi un siglo después la hemos vuelto a ver produciendo en muchos el asombro ante el paso del tiempo.
Lo que no sé si sabían es que al interior de esas bóvedas se podía acceder a través de un estrecho pasaje desde el interior del torreón. Es ahí donde se encuentra la maquinaria de la fuente que se pretende cambiar por equipos modernos. Un lugar que se limpiará y mantendrá como joya histórica. La puerta que se distingue perfectamente en las bóvedas se volverá a abrir para sacar el viejo material y meter el nuevo.
¿Cuáles son los pensamientos del Ayuntamiento ante un hecho que ha causado entre los gaditanos gran sorpresa a pesar de saber de su existencia? Pues parece ser que entre sus planes están los de habilitar un acceso a estas bóvedas y a las nuevas instalaciones de la fuente a través de una escalera de madera que nos colocaría a pie de la muralla permitiéndonos verla al completo. Aunque claro, como todo en esta vida, esto se llevará a cabo si se logra sacar adelante el proyecto de Aguas de Cádiz para poner en uso estos restos históricos y se consigue la financiación necesaria que podría rondar los 100.000 euros. En cuanto a esto último y tras ese remanente del que el Ayuntamiento presumía hace unas semanas, no debería haber problema. Otra cosa es que la Junta de Andalucía apoye también el proyecto y esto no se convierta en una nueva excusa para tirarse los trastos a la cabeza.
Dicho esto y de llevarse a cabo la recuperación de estas bóvedas lo que pedimos son dos cosas: que esto no se alargue ahora en el tiempo como la inmensa mayoría de las obras que se hacen en Cádiz y que de recuperarlas, haya la firme intención de mantenerlas evitando que aquello termine en el estado en el que se encuentra por ejemplo el gaditano Parque Genovés.
@ManoloDevesa





