Españoles de bien

¿Fue usted en el día de ayer a la manifestación de la plaza de Colón en Madrid para manifestarse por los indultos que próximamente llevará a cabo el Gobierno sobre los condenados del «procés» catalán? Pues si no es así siento decirle que no es usted un español de bien. Probablemente sea usted un ser siniestro, separatista, enemigo de España y comunista (esto último si cuela colón, digo coló). No lo digo yo, lo dicen ellos. Los de siempre, ya saben… Juntos pero no revueltos, PP, CIUDADANOS y VOX intentaron no coincidir por aquello de no repetir la foto de hace unos años.

¿Hasta dónde puede llegar la hipocresía de los políticos? Defender una misma cosa, que es lícito, faltaría más pero ojo, sin arrejuntarse. No vayan a creer los votantes que son lo mismo y los votos son los votos. El Partido Popular intenta separarse de los voxeros a sabiendas de que son los únicos que pueden darle el sillón de Moncloa como bien adelantan ya algunas encuestas electorales. Y saben también que no dudarán en pactar con ellos en el momento en que puedan tener la oportunidad de formar Gobierno. ¿Se acuerdan de las noches en las que Sánchez no podía dormir pensando en que Podemos estaría en el Gobierno? Pues esto es lo mismo. En el fondo algo comprensible porque la política del siglo XXI obliga a pactar a veces en contra de tus propias creencias. «Quieren el poder ante todo» dicen muchos ahora sobre Sánchez. ¿Dirán lo mismo cuando Casado y Abascal se conviertan en los nuevos Sánchez e Iglesias?

El tema de los indultos se las trae. Es el precio que se debe pagar por el apoyo de grupos políticos al Gobierno. Algo que España debe empezar a asumir descartada la posibilidad de cambiar la ley electoral para que gobierne el más votado, que sería lo más coherente. Pero seamos honestos, en cuestión de coherencia, nuestros políticos andan más bien escasos. El arrepentimiento debería ser vital para que el indulto puede llevarse a cabo. Se supone que la cárcel sirve para la reinserción y no para que uno chulescamente de a entender que si lo tiene que hacer, lo hará de nuevo. Es lo que parece que ocurre con los condenados del «procés» y que deja a Sánchez en un lugar lamentable.

Sin embargo también podemos verlo como una estrategia o solución didáctica al problema de Cataluña. Como cuando los padres quitan el castigo a sus hijos para comprobar si han aprendido la lección. Un intento desesperado por hacerles entender que lo que quieren es complicado y hasta imposible en nuestra Constitución. Si reincidiesen en hacer lo mismo que se hizo durante el Gobierno de Mariano Rajoy, ellos mismos se autodestruirán no valiéndoles la excusa de la incomprensión del Gobierno…

Ayer muchos españoles salieron a la calle para demostrar su desacuerdo con lo que ellos consideran injusto. Otros lo hicieron simplemente por inercia. Por seguir intentando derrocar al Gobierno que ellos no votaron y que por eso consideran inapropiado. El que no esté de acuerdo con ellos, no es un buen español. Ya ven. Por cierto, viendo ayer las imágenes de la manifestación pensé que esa unión sería maravillosa como protesta para el crimen que se está cometiendo con la factura de la luz… Pero claro, pensé: ¿Cómo van a organizar manifestaciones los mismos partidos que han llevado a cabo las mismas políticas en años anteriores y que volverán a hacer una vez se encuentren en Moncloa? Además eso sería luchar por un bien común y no por sus propios intereses.

@ManoloDevesa

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