Cádiz ha despertado este Domingo de Ramos asumiendo vivir su Semana Santa de manera diferente un año más. Si el pasado año lo vivió dentro de un estricto confinamiento, éste se ha decidido vivir en la calle. No hay desfiles procesionales pero las iglesias están abiertas para que todo el que así lo desee pueda visitarla. Eso sí, manteniendo las distancias y con un aforo limitado. De ahí que se hayan producido colas en diferentes templos. Aunque no ha sido el único sitio donde las ha habido. Bares y restaurantes permanecían llenos y con colas para poder entrar. Estas son algunas de las estampas que este Domingo de Ramos nos ha regalado:







@ManoloDevesa