En estos días de Cuaresma mis recuerdos me han llevado hasta San José y en concreto a una iniciativa que a pesar de que llegó bastante lejos, tuvo que ver como un cambio de última hora daba a traste con las ilusiones de aquel grupo de devotos que se presentaban públicamente en 2014. Les hablo del Cautivo de San José.
Aun recuerdo las caras de ilusión de muchos de ellos cuando vieron que aquel modesto grupo se convertía gracias al Obispado en agrupación parroquial completando así un paso más para convertirse en una hermandad de penitencia. Se llegó a hablar incluso de que el Cautivo se haría un hueco en la madrugada del Viernes Santo, tan abandonada en los últimos años tras los abandonos de varias hermandades.
Sin embargo y aunque todo parecía encaminado a que aquel sueño se hiciese realidad, el traslado de la Borriquita a la parroquia de San José terminó truncando la creación de la hermandad. A pesar de que los verdaderos motivos no se dieron a conocer nunca, todo hace indicar que el párroco de entonces creyó innecesario que dos hermandades compartiesen la iglesia. Más cuando la del Cautivo solo era aun un grupo de devotos. Así que se decidió de esta manera apostar por Borriquita cuya vuelta a la iglesia que la vio salir por primera vez, había conseguido crear muchas expectativas…
La imagen del Cautivo llegó a procesionar varias veces en ViaCrucis por los alrededores de la iglesia de San José. La primera de ellas y generando una auténtica expectación, en la Cuaresma de 2015. Aunque es cierto que desde aquel momento la agrupación parroquial comienza a ser la diana de algunas críticas dentro incluso del mundo cofrade… Finalmente con la marcha de la parte más importante del núcleo, la desilusión terminó años después con su disolución.
@ManoloDevesa | Imagen: extraída del vídeo de Onda Cádiz