Diez impactantes estampas que marcaron a los gaditanos este 2020
El año que se va nos deja imágenes que jamás habíamos pensado vivir. Fue en el mes de marzo que los gaditanos nos encontramos, al igual que el resto de españoles, ante una situación difícil de asumir: el cierre de bares y restaurantes, las colas en los supermercados, el cierre del comercio en general, la cancelación de celebraciones, los coches de la policía por las calles mirando para que el confinamiento se cumpliese… Fue en el mes de marzo cuando toda esta pesadilla comenzó…
Sobre todo los primeros días de confinamiento, el sonido de los altavoces de la policía mandando a la gente a casa fue de las primeras sensaciones en que esto era mucho más serio de lo que pensábamos.
De la alegría y el jolgorio de los carnavales al silencio sepulcral que se instaló en las calles. Ver como las luces de carnaval seguían puestas en el mes de abril, daba la sensación de que el mundo se hubiese parado por completo y nos hizo sentir nostalgia de un tiempo en el que sin saberlo fuimos felices.
Acostumbrados a su bullicio habitual, ver una solitaria plaza del Palillero en plena Semana Santa con sus palcos puestos fue desde luego desconcertante. No fue la única celebración en cancelarse…
La hostelería fue y sigue siendo el sector más perjudicado de la pandemia. Era imponente ver las terrazas vacías y los bares cerrados.
El aplauso diario a las ocho desde los balcones de todas la ciudades de España fue emotivo hasta que, como todo, se politizó.
Sin duda una de las imágenes más características del confinamiento fueron las largas colas para entrar en los supermercados.
El aumento de gente viviendo en las calles de la ciudad es más que evidente y nos hace entender el duro momento que vivimos. Descorazonador.
El simple hecho de pasar un día en la playa provocó largas colas sobre todo en La Caleta y Santa María del Mar.
No todo fue negativo. El Cádiz CF subió a primera aunque las celebraciones se toparon con el Covid-19 y sus numerosas restricciones. Aun así hubo quien hizo caso omiso de ellas.
De repente todo el mundo salió a la calle con sus mascarillas. Aun a día de hoy sigue impactando esta imagen tan normalizada ya
LA AZOTEA DE CÁDIZ 