Finalmente la enorme y comprensible repercusión mediática que han tenido las últimas informaciones sobre el Rey Juan Carlos I y que hablaban de presuntas cuentas en paraísos fiscales, ha terminado con el abandono por parte del monarca del país en el que reinó durante cuatro décadas. De esta manera el emérito ha decidido marcharse al extranjero para contribuir, le ha dicho a su hijo mediante una carta, a que pueda desarrollar su función “desde la tranquilidad y el sosiego” que el cargo requiere.
Sin embargo se desconoce el país donde vivirá a partir de ahora. Eso sí, deja claro que aunque ya en el extranjero “permanece a disposición en todo momento del Ministerio Fiscal para cualquier trámite o actuación que se considere oportuna” ha informado su abogado, Javier Sánchez-Junco.

La marcha del Rey Juan Carlos tiene nombre y apellidos: Corinna Larsen. La princesa que se enfrenta a una pena de hasta cinco años de cárcel por blanqueo de capitales, declaraba ante el fiscal suizo que el monarca le donó 65 millones de euros que supuestamente le había regalado el rey de Arabia Abdullah bin Abdulaziz. Estas informaciones unidas a la relación que presuntamente mantuvo con ella con quien viajó por el mundo en viajes oficiales y privados, han tenido tal repercusión mediática que han empujado al emérito a abandonar España para evitar dañar a su propio hijo.
@ManoloDevesa