Que raro que con la que hay liada en España, el tío de La Azotea no se haya ni pronunciado con tantos carnavales. Es lo que se supone que deben pensar ustedes acerca de que en este blog no se haya hecho mención alguna del último grito en reportajes y artículos de click fáciles.

La Azotea de Cádiz aunque muchas veces lo pueda parecer no es un medio de comunicación si no un blog que se abastece de la actualidad de la ciudad y que acude puntualmente a los periódicos para contarles lo que está pasando de un modo más cercano y crítico. Lo del Coronavirus ha llenado páginas de periódicos y tertulias de televisión aunque haya sido de la fora más incoherente posible. Porque cómo se explica que los medios de comunicación nos pidan en un gesto más de postureo que de otra cosa, que no nos alarmemos cuando son ellos precisamente los que dan la matraca mañana, tarde y noche. De los dos casos en Cádiz, uno en Puerto Real y el otro en la capital, ninguno de los dos daba positivo pero la alarma ya estaba en las calles a la vez que se pedía tranquilidad.

En LA AZOTEA intentamos mirar la actualidad desde otro prisma siempre. Por eso, en vez de alertar e intranquilizar a la gente, optamos por explicar de manera sencilla qué es el coronavirus y la manera de protegerse de él.

¿Qué sabemos del Coronavirus?

El coronavirus propiamente dicho es como se llama a la familia del virus que puede atacar tanto a animales como a humanos. A nosotros puede causarnos infecciones respiratorias que pueden ir desde el resfriado común hasta enfermedades más graves como el síndrome respiratorio de Oriente Medio (MERS) y el síndrome respiratorio agudo severo (SRAS). De la familia en general, el coronavirus que se ha descubierto recientemente es el COVID-19.

Síntomas: Fiebre, cansancio y tos seca. También puede presentar dolores, congestión nasal, rinorrea, dolor de garganta o diarrea.

¿Es mortal? Según la OMS la mayoría de las personas (alrededor del 80%) se recupera de la enfermedad sin necesidad de realizar ningún tratamiento especial. 1 de cada 6 personas desarrolla una enfermedad grave y tiene dificultad para respirar. Los pacientes más delicados son las personas mayores y las que padecen afecciones médicas subyacentes. Esto es hipertensión arterial, problemas cardiacos o diabetes. Solo el 2% de las personas que han contraído la enfermedad han muerto.

¿Cómo se transmite? Su forma de contagio es la más habitual: mediante la tos a través de las gotículas procedentes de la nariz o la boca. Para contagiarse la otra persona debe tocar la superficie sobre la que haya caído las gotículas y luego tocarse los ojos, la nariz o la boca o inhalar dichas gotículas. Lo ideal es que haya una distancia de más de un metro con el enfermo.

¿Cómo evitar el contagio? Lavándonos las manos a fondo y con frecuencia usando un desinfectante a base de alcohol o con agua y jabón, mantenernos a una distancia mínima de 1 metro (3 pies) entre nosotros y cualquier persona que tosa o estornude, evitando tocarnos los ojos, la nariz y la boca, quedándonos en casa si no nos encontramos bien, tenemos fiebre, tos y dificultad para respirar.

Información cogida de la OMS