Cubierto por una corona de laurel adornada con una bandera de España y al grito de «¡Viva España, Viva Franco!», los restos de Francisco Franco salían a las 12.54 de la basílica del Valle de los Caídos cuarenta y cuatro años después de su muerte. Sus nietos Francis, Jaime y Cristóbal y su bisnieto Luis Alfonso de Borbón lo sacaban a hombros hasta el coche fúnebre que lo trasladaba hasta el exterior de la basílica. Entre los numerosos grupos de personas que portaban banderas franquistas y que han llegado a cantar el «Cara al Sol» se encontraba el ex teniente coronel Tejero. Con 87 años, el golpista ha sido recibido por un centenar de personas entre gritos de “Viva Tejero” y “Arriba España”.
En el helicóptero que portaban los restos del dictador viajaban la ministra Delgado y Francis Franco. Los restos han ido en el ataúd original por deseo expreso de la familia e iban camino del cementerio Mingorrubio El Pardo donde descansarán junto a los de su mujer.
Más de cuatro décadas después, los familiares de los 30.000 cuerpos que fueron trasladados al mausoleo del Valle de los Caídos sin previo aviso, la mayoría republicanos, respiran un poco más tranquilos. Al menos la impotencia que les producía ver que el responsable de todo esol descansara junto ellos, se ha apagado un poco más hoy. Terminará de apagarse por completo cuando puedan encontrarse, como los familiares de Franco hoy, con sus restos tantas décadas después.
EL DETALLE
En los alrededores del cementerio de Mingorrubio han tenido lugar protestas por parte de muchos franquistas que no han dudado en realizar el saludo fascista, cantar el «Cara al sol» e insultos al presidente Sánchez.
El nieto del dictador, Francis Franco, colocaba la bandera preconstitucional en las puerta de su oficina, algo prohibido por la ley de Memoria Histórica, y que ha tenido que ser retirada.
@ManoloDevesa