Esta semana parte del pavimento de la plaza del Palillero era reformado aprovechando las obras en Feduchi que mejorarán el suministro eléctrico de ZARA. A su término hemos visto como los dos bancos que se encuentran frente por frente a la Fundación de la Mujer han sido pintados con los colores de la bandera LGTBI. Aparte de la vistosidad que ahora tienen y lo bonitos que han quedado, sin duda es una muestra municipal más de apoyo a un colectivo que estos días conocía un nuevo caso de homofobia. Ocurría en el metro de Londres donde dos mujeres eran golpeadas por un grupo de hombres después de que se negaran a besarse, tal y como le pedían sus agresores.

Con este nuevo gesto por parte del Ayuntamiento se renueva el compromiso de apoyo al colectivo LGTBI a través del I Plan LGTBIfobia que el Pleno municipal aprobaba por unanimidad el pasado 29 de marzo. Se trata de visibilizar y sensibilizar a la sociedad sobre una situación que siguen sufriendo muchas personas por cuestiones tan básicas como su orientación sexual. No sabemos si solo serán estos bancos los que luzcan así o se pintarán el resto de la plaza.

Desgraciadamente y a pesar de lo que mucha gente pueda pensar, la homofobia continúa vigente en pleno siglo XXI. Sigue viva en forma de burlas cada vez que hay algún gesto como éste, de miradas cada vez que dos personas del mismo sexo se besan en público o van de la mano y se manifiesta con comentarios lleno de prejuicios en donde la homosexualidad u otra opción sexual es puesta siempre en tela de juicio. Cuenten con comentarios en las redes tipo: «queremos bancos heteros» al igual que dicen cuando la bandera LGTBI algún edificio público, ya les aviso. Una verdadera lástima. Son incapaces de reconocer de que por el hecho de ser heteros no son victimas ni de rechazo, violencia o desprecio. Todo lo contrario que un colectivo que viene sufriendo este tipo de comportamientos desde tiempos inmemorables.

@ManoloDevesa