PISTA 1: Bien por la falta de información o por el machismo de la época, una misterioso nube de sobrevuela la identidad del personaje de esta semana: ¿Era ese su nombre real? ¿Era un hombre o una mujer?
PISTA 2: Continuando con el enigma sobre su existencia y sexo, el expediente de nuestro personaje abre la puerta a la posibilidad de que no hubiese nacido en Cádiz y fuese gaditano/a de adopción. Eso explicaría que no se encontrase su partida de bautismo en la ciudad.
PISTA 3: Siguiendo con el misterio de su identidad, en el libro «Historia del periodismo gaditano» de Ramón Solís, podemos leer que quizás su nombre era en realidad un seudónimo tras el que se ocultaba un fraile.
PISTA 4: De igual modo que su identidad se pone en duda, hay quienes tienen claro definir a nuestro personaje como moralista, satírica o poetisa. Una autora que se cambió el nombre para publicar sus pensamientos.
PISTA 5: Esta pista puede ser la qie os despeje más dudas: bajo este nombre apareció uno de los periódicos más interesantes del siglo XVIII español, La Pensadora Gaditana.
@ManoloDevesa