Hasta cuarenta y cuatro autobuses se llegaron a contar ayer en la carretera industrial de Astilleros. Así estaba Cádiz, repleto de gente. Colas en la plaza de Candelaria que llegaban a Sacramento. ¡Que barbaridad! ¿Qué repartían? Pues el tradicional pescado frito.
El Domingo de Piñata daba por terminada la semana de carnavales y lo hacía entre tangos como los que se pudieron escuchar en Candelaria, calle Ancha o Plaza de abastos y las muchas ilegales que se repartieron por los rincones mas recónditos de todo el casco antiguo. El Bizcocho se apoderaba del Palillero a eso de las tres de la tarde, el Morera actuaba en el BBVA de San Francisco al anochecer…
De esta manera el domingo fue agotando sus horas hasta llegar al momento en que culmina esta semana de letras en las calles, papelillos y alegría: la quema de la bruja Piti en la Caleta y los posteriores fuegos artificiales daban por concluidas las fiestas de Don Carnal (amen del carnaval chiquito del domingo que viene) hasta que el año próximo.
@ManoloDevesa / Fotos: Manolo Devesa y RLMendez
LA AZOTEA DE CÁDIZ 