Hace menos de veinticuatro horas las calles de nuestra ciudad estaban llenas de papelillos, los coros cantaban sus últimos tangos y la carpa seguía dando guerra en el muelle pesquero hasta altas horas de la mañana. Sin embargo hoy a las siete menos cuarto de la tarde ya podía olerse el característico olor de Semana Santa. Las calles de Cádiz ya olían a incienso.

A esa misma hora desde la iglesia del Carmen, el Señor del Prendimiento salía en Viacrucis oficial para estar a las ocho en Catedral. Para tal ocasión una túnica de brocatel en color morado realizada en el taller de Fernando Calderón, en Jerez. También estrenaba camisa y el cuello. El Señor recorrió las calles de nuestra ciudad sobre una parihuela cedida por la hermandad jerezana del Desconsuelo.

Tras pasar por Bendición de Dios, el cortejo siguió por Enrique de las Marinas, San José, Ancha, Novena, Palillero, Columela, Plaza de las Flores, Compañía, Catedral y Arquitecto Acero. De vuelta a su templo, el Señor del Prendimiento regresó por Arquitecto Acero, Catedral, Cobos, Cristóbal Colón, San Francisco, San Agustín, Rosario, Tinte, Mina, Enrique de las Marinas, Bendición de Dios y Alameda.

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@ManoloDevesa / Fotos: RLMendez y Pablo Devesa