Vaya por delante, que a mí me da lo mismo donde las agrupaciones de carnaval vayan a cantar, porque cada uno se busca las habichuelas donde le da la gana pero… hay que ver la gente criticando por las redes, como se ha puesto con el Selu, porque va a ir a cantar a un mitín del naranjito…

Más o menos así podría empezar Jose Luis García Cossío uno de sus geniales pasodobles a raíz de la polémica que ha suscitado su participación en un mitín de CIUDADANOS. Los chirigoteros y comparsistas, amigos en su mayoría de la izquierda de esta ciudad, parecen traicionar a un sector de la ciudad por el simple hecho de aceptar una oportunidad más para trabajar. En su día, el mismo grupo cantó para PODEMOS, también con algunas críticas por la parte contraria de las que hoy escuchamos.

A veces tengo la sensación que, cuando escucho hablar de esa palabra tan grande para mí como es la libertad, se hace demasiado a la ligera. Sin ser conscientes de lo que verdaderamente significa. La libertad es también respeto por las decisiones que se tomen sin tener que hacer sentir mal o coartar a nadie por el mero hecho de que no estemos de acuerdo. Claro que nuestra opinión es libre. Pero dentro del derecho que supone el opinar, deberíamos tener «dos deos de frente«, que decimos por aquí.

Por desgracia, el trabajo se ha convertido en un verdadero lujo para el que lo tiene más que uno de esos derechos que conforman la Constitución. Por eso mismo, el trabajo y el ganarse la vida honradamente jamás debería ser excusa para la crítica. ¿Acaso uno le pregunta al jefe que lo contrata qué ideales políticos tiene cuando va a una entrevista?

Debemos sustituir la demagogia de una buena vez por el sentido común. Por muy bien que a veces nos venga. Si durante mucho tiempo los ideales de personajes públicos se mantuvieron en secreto fue por cosas como éstas. Poco a poco salen a la luz y… ¿les cuento la experiencia de algunos de ellos?…

La chirigota del Selu ni siquiera ha descubierto sus inclinaciones políticas. Pero ¿qué hubiese pasado si lo hubiese hecho? Cada vez más a menudo, las diferentes agrupaciones se atreven a mostrar más sus predilecciones. Eso no debería ser ningún problema a la hora de clasificar su calidad. Debemos aprender a respetar. Es como si la comparsa de Jesús Bienvenido hubiese tenido que aguantar desde que uno de sus miembros se convirtió en alcalde comentarios en tono despectivo por el mero hecho de seguir siendo lo que fueron…

@ManoloDevesa