Arriesgándome a que penséis que soy un torpe de tres pares de narices, he de confesarles que aquí servidor se pasó un buen rato ayer mirando esta foto a la que no le veia ni pies ni cabeza. Me la topé en varias ocasiones por las redes sociales y comprobé que no era el único al que le desconcertaba.

Llegué a pensar que era una obra inédita de Picasso o directamente un montaje con mu mala leche de Photoshop. Así que tras descubrir el secreto, me apetecía compartirlo con vosotros. La verdad que una vez descubierto qué le ocurre al perro, la foto deja de tener ningún tipo de misterio. A ver le encontráis la explicación…
@ManoloDevesa