Que difícil es seguir a veces el camino cuando una piedra se te cruza de improviso. Y más cuando a pesar de intentar ver siempre el vaso medio lleno, la vida se empeña en mostrarte su peor cara. Pablo logró una gran popularidad por contagiar con su optimismo a una importante parte de la sociedad que se concienció de la importancia de donar médula. Pablo Raez, joven atleta de solo veinte años decidió compartir con nosotros a través de las RRSS su encarnizada lucha contra la leucemia. Y a pesar de someterse a un trasplante de médula, su cuerpo la rechazó.

Sin embargo, su optimismo e imponente fuerza se han ido apagando en los últimos dias hasta que hoy hemos sabido que se ha ido dejando un enorme vacío en muchas de las personas que lo seguíamos en las redes sociales.

Como él mismo decía en su último estado: “La muerte forma parte de la vida, por lo que no hay que temerla, sino amarla”. Después de dos intensos y horribles años, solo nos consuela saber que por fin Pablo descansa en paz. A pesar de saber que su final estaba cerca, siempre tuvo una sonrisa para todos. DEP

@ManoloDevesa