Que conste que ante todo, estoy tajantemente en contra de cualquier tipo de maltrato en este mundo. Ya sea a animales, políticos o al responsable de cualquier letra de reggeaton.

Ahora en serio. En el caso de la muerte del gorila Herambe, el tema del maltrato y defensa de los animales, cosa en la cual creo firmemente, no nos puede cegar de manera que la demagogia sustituya una vez más (y van ya yo que sé) a la coherencia.

Claro que me parece triste que un animal muera ya sea por la causa que sea. Que uno se indigne con fiestas tan salvajes como el Toro de la Vega, aquella que tiran a un animal del Campanario o la propia fiesta Nacional es algo que veo hasta lógico. Lo que me parece una auténtica pasada es querer culpar a unos padres de la muerte de un animal al que ellos no han matado.

Por si acaso no saben de que les hablo, hace unas semanas, un niño caía en un zoo al lugar donde estaban los gorilas. El animal lo cogió y podríamos decir que lo salvo al cogerlo del agua. Sin embargo, la dirección del Zoológico y temiendo a que atentase contra la vida del chico en cualquier momento, optó por matarlo. ¿Por que desecharon la posibilidad de dormirlo? Las críticas y la indignación llenaban las redes sociales ante algo completamente comprensible. Pero cuál ha sido mi sorpresa que un buen número de esas críticas no iban dirigidas a las manos que acabaron con la vida del gorila, sino contra los padres del niño.

Ha llegado este punto a tal estupidez, que finalmente parece que van a investigar a los padres del chico. Mi pregunta es ¿sobre qué? ¿que pretenden sacar de esa investigación? ¿acaso creen que quería que su hijo muriese devorado por un gorila?. Si hay algo más difícil incluso que mantener el coco en su sitio defendiendo según que ideales, es la de ser padres las 24 horas del día.  Un niño es impredecible, rápido y escurridizo como él solo. ¿A quien no se le ha escapado alguna vez uno en la milésima de segundo que ha vuelto la cara? 

Que la investigación pueda sacar a flote un comportamiento y una historia denunciable más allá de lo sucedido, vale. Ahora bien, juzgar a unos padres por lo que podría ser perfectamente un descuido de lo más inoportuno sin más conocimiento que el de la crítica pura y dura, me parece querer ser más papistas que el Papa.

@ManoloDevesa